Cómo tratar a una persona con depresión
La depresión es un trastorno que cada vez afecta a más personas. Por ello, en muchas ocasiones resulta muy útil saber cómo tratar a una persona con depresión. De hecho, es muy probable que a lo largo de tu vida, bien tú misma o bien alguien de tu entorno cercano sufra depresión.
Así pues, a lo largo de este texto vamos a tratar de acercarte a lo que siente alguien con depresión. Además de darte consejos para que a la hora de tratar con él o ella sientas la tranquilidad de saber cómo actuar.
¿Qué siente una persona con depresión?
En muchas ocasiones, puede resultar muy útil que te plantees cómo se siente una persona que padezca este trastorno. Aunque en algún momento de tu vida te hayas sentido triste, no es comparable con dicha sensación. Puedes imaginar a una persona que sufra depresión reactiva, alguien que haya vivido un acontecimiento negativo que no sea capaz de afrontar. Y esto es algo que debes tener presente a la hora de tratar con alguien que tiene esta enfermedad.
No puedes pensar que sabes cómo se siente ni actuar como tal ya que, en efecto, no lo sabes. Así pues, vamos a tratar de explicártelo para que puedas entender la importancia de cuidar la forma de actuar con quienes tienen depresión.
Aunque no hayas sufrido en primera persona esta enfermedad, probablemente sí hayas experimentado alguno de los síntomas de depresión, o todos, por separado. De esta manera, es bastante probable que alguna vez te hayas sentido:
- Desmotivada para cumplir tus objetivos
- Desganada o sin interés hacia algo que antes sí te gustaba hacer.
- Incapaz de disfrutar con las actividades que antes sí te hacían disfrutar.
- Irritable por cualquier cosa.
- Incapaz de concentrarte al nivel que te gustaría.
Pues bien, probablemente hayas ido recordando cuándo te has sentido así a lo largo de tu vida. Pero para que te hagas una idea de qué conlleva la depresión, debes saber que la persona que la padece sufre estos sentimientos de manera continua y durante un periodo de tiempo extenso.
Por tanto, llevar a cabo su día a día puede volverse una tarea titánica para ellos. En cierto modo, se encuentran en un punto intermedio entre lo que les gustaría hacer y lo que realmente tienen ganas de hacer.
Conociendo esto, te será mucho más fácil ponerte en el papel del enfermo y comprender su situación. Esto es principal para poder ayudarle como necesita y apoyarle.
Cómo tratar a una persona con depresión
Como es normal, sobre todo si este desánimo lo padece un ser querido tuyo o alguien cercano, querrás ayudarle y apoyarle todo lo que puedas. No obstante, en estos casos debes saber que aunque la intención sea buena, esta no siempre es suficiente ni los resultados son positivos.
Por este motivo, se vuelve una tarea importantísima saber cuál es la forma en la que tu ayuda puede ser más eficaz. Contar con un apoyo social es muy bueno para alguien con esta enfermedad. Pero muchas veces esto puede volverse en contra porque la forma de apoyar no sea la adecuada y acabe empeorando la situación, haciendo sentir más presión a la persona que la padece.
De hecho, algo muy común cuando ves a alguien que se siente mal es intentar que vea las cosas como tú las ves. En el caso de alguien que sienta este decaimiento, dicha actitud es totalmente contraproducente.
Pero no tienes de qué preocuparte ya que en este epígrafe te vamos a explicar cómo tratar a una persona con depresión. Dándote pues consejos que puedes aplicar en tu día a día.
1. Valora a esa persona
Ciertamente, acompañar a alguien que padece depresión es algo muy cansado. Requiere de una paciencia infinita y de mucho tacto para no herir sus sentimientos. Obviamente, tú eres humana y puedes tener un mal día y aunque acabes enfadándote por la actitud de la otra persona, es conveniente hacerla sentir valorada.
Esto será muy importante ya que, de lo contrario, pensará que es una carga. Lo cual le sumirá aún más en su sentimiento de desesperanza.
Por tanto, decirle que le aprecias, que es importante para ti y que le quieres y quieres apoyarle será muy importante para su recuperación.
2. Mide tus frases de ánimo
En ocasiones y aunque tu intención sea la mejor del mundo, tus frases de ánimo pueden no resultar eficaces. Estas pueden transmitir a la otra persona que es débil y magnificar el problema ante sus ojos.
A fin de cuentas, lo que buscas con ello es animar a la otra persona y esta, al sentir que no es capaz de hacerlo puede sentirse culpable y abatida por ello. Hay que entender que desde su punto de vista esos mensajes están totalmente vacíos y dan la imagen de que lo que padece es una tontería cuando no lo es.
Por tanto, lo mejor es evitar las frases del tipo "¡sé positivo!", "no te preocupes que pronto se te pasará", "venga, que esto no es nada para ti"...
3. Dale importancia a sus sentimientos
Una de las acciones que mucha gente lleva a cabo es ignorar esta enfermedad y hacer como si no existiera. Y, por ende, hacer como que quien padece depresión está perfectamente y no le pasa nada. Como podrás entender, esto es algo muy negativo para el afectado, que sentirá que su problema se trivializa y no se considera relevante.
Por este motivo, es importante que su entorno acepte que hay un problema y le dé la importancia que tiene. De esta manera, el enfermo podrá afrontar de forma más positiva que, efectivamente, tiene un problema y ha de solucionarlo.
Si el afectado se siente arropado por su entorno y ve que los demás le dan importancia a su problema, él también se la dará y esto le motivará a superarlo y a afrontar el bloqueo emocional. En cualquier caso, también has de tener cuidado con las ganancias secundarias, que son un exceso de cuidados al afectado los cuales pueden derivar en que este pierda el interés por recuperarse.
4. No intentes ser su psicóloga
Ante todo, quien padezca depresión ha de acudir a un psicólogo profesional que pueda tratar su caso de la manera adecuada. En muchas ocasiones, sobre todo si conoces bien al afectado, puedes creer que eres capaz de ayudarle y solucionar su problema.
Pues bien, quítate esa idea de la cabeza. Tu apoyo y cariño serán importantes en su recuperación, pero es necesaria la ayuda del psicólogo en la depresión. Este podrá establecer un diagnóstico y llevar a cabo un tratamiento adecuado a su enfermedad.
5. Respeta sus silencios
Algo que muchas veces puede costarte hacer es el respetar que el afectado no quiera hablar de lo que le ocurre. Esto es fundamental ya que cuando una persona siente esta desolación es importante que tenga sus momentos de introspección y relajación.
Por ello, debes estar dispuesta a escucharle si te quiere hablar de algo, pero nunca presionarle para que lo haga si verdaderamente no quiere. A fin de cuentas, el aislamiento y la dificultad comunicativa son síntomas propios de la depresión.
Tu presión no hará más que hacerle sentir tenso y le llevará a aislarse aún más. Quien tiene depresión tiene unas limitaciones claras y estas deben ser respetadas y entendidas por su entorno.
6. No le pidas explicaciones
Otro de los errores más comunes que se cometen con los afectados es pedirles explicaciones sobre por qué se sienten como se sienten. Ante todo, debes ser consciente de que quien tiene depresión no sabe por qué la tiene en la gran mayoría de los casos.
De hecho, si lo supiera su recuperación sería mucho más fácil, pero normalmente no lo saben. Por este motivo, no debes pedirle explicaciones o hacerle ver que lo que siente está fuera de lugar debido a todo lo bueno que tiene en su vida.
La desorientación sentimental de estas personas es un síntoma claro y también duro. Así pues, lo mejor que puedes hacer es no pedirle explicaciones sino intentar que salga de esta situación.
7. Transmítele esperanza
Quienes sufren depresión sienten una continua pena, desesperanza, angustia, desgana y sensación de impotencia. Por ello, lo que mejor les puede venir es que con tu forma de tratarles, tus actos y palabras les transmitas esperanzas. Siempre respetando que la persona se niegue a aceptar que hay esperanza para él o ella, pero no dejar que esa idea abandone la forma en la que te relacionas con el afectado.
8. Refuérzale positivamente
Cuando muestre una buena actitud, demuéstrale que lo ha hecho bien. De igual forma, cuando salga la oportunidad, alaba sus virtudes y puntos fuertes.
Aunque en un principio te rechace estas afirmaciones, todo mensaje positivo tiene una incidencia buena en el enfermo. Por tanto, no dejes de recordarle lo mucho que le quieres y las cualidades que tiene.
No te olvides de ti misma
Por último, antes de acabar este artículo queríamos hacer hincapié en que es importante que no te olvides de ti misma al tratar a alguien con depresión. En un primer momento, lo normal es que te centres en quien padece la enfermedad pero esta es un duro trámite en el que no te puedes abandonar a ti misma.
Así pues, date tu espacio, tus momentos para estar a solas y para despejarte. De lo contrario, nunca sabrás cómo tratar a una persona con depresión adecuadamente ya que acabarás saturada y, en cierto modo, cansada de la situación que estás atravesando tú también.
En Therapyside encontrarás profesionales que te pueden aconsejar, apoyar y ayudar a alcanzar tu mejor versión.