Impacto de las redes sociales en la salud mental
¿Sabías que en España pasamos alrededor de seis horas diarias conectados a Internet? De estas seis horas, dedicamos aproximadamente dos horas al consumo de las redes sociales, incrementándose esta cantidad de tiempo en población adolescente y joven. Así lo afirman informes recientes sobre tendencias digitales y redes sociales.
Facebook, YouTube, Instagram, Twitter y TikTok son las plataformas más utilizadas actualmente en el mundo y en nuestro país. Para comprobarlo, te proponemos un sencillo ejercicio. ¿Cuáles y cuántas de estas redes tienes instaladas en tu Smartphone?
En enero de 2021, We Are Social y Hootsuite lanzaron un informe con las conclusiones derivadas de un análisis digital efectuado para la investigación en este campo. De una población total de 7.83 billones de personas en el mundo, 5.22 billones de personas tienen acceso a Smartphones. De ellos, 4.66 billones de personas son usuarios de Internet, y de ellos, 4.20 billones de personas son usuarios activos de alguna red social.
Tomando estos datos, seguramente te resulte más rápido pensar y nombrar la gente de tu entorno cercano que no tiene ninguna red social, que la que sí.
Está claro que las redes sociales han llegado para quedarse, y por ello, en el artículo de hoy, te ofrecemos información relevante y una serie de recomendaciones para hacer un uso saludable y responsable de las mismas, consiguiendo un impacto positivo de estas plataformas en tu salud integral, y más concretamente en tu salud mental.
Cómo detectar si las redes sociales están teniendo un impacto negativo en mi salud mental
Al utilizar prácticamente a diario las redes sociales, debemos identificar y tener en cuenta varios factores para determinar si su uso está suponiendo un beneficio, una situación neutra, o un perjuicio para nosotros. En el primer y en el segundo caso, podremos seguir haciendo el mismo uso de las redes sociales que hasta ahora, pero en el último caso, sería recomendable identificar y modificar aquellos elementos que están haciendo que el uso de las redes sociales esté teniendo un impacto negativo en nuestra salud mental.
En caso de que detectes alguna de las siguientes conductas, sensaciones y/o emociones, probablemente el uso que estás haciendo de las redes sociales está siendo perjudicial para ti, por lo que puede estar teniendo un impacto negativo en tu bienestar integral:
- Necesidad excesiva de acceso a Internet y a las redes sociales.
- Pérdida de la noción del tiempo o el espacio durante el uso de las distintas plataformas.
- Sensación de malestar físico o emocional cuando por cualquier motivo no se pueda tener acceso a las redes sociales, como por ejemplo al tener una pobre conexión a internet o poca batería en el dispositivo electrónico que se esté utilizando.
- Sensación de malestar físico o emocional antes, durante, o después de utilizar las redes.
- Interferencia del uso de las redes sociales en las interacciones físicas con otras personas que se traduce en un decremento de las habilidades sociales y de la cantidad y calidad de las interacciones establecidas.
- Preferencia y exclusividad del tiempo de ocio dedicado a las distintas plataformas por encima de cualquier otra actividad gratificante.
- Descuido de responsabilidades escolares, laborales o sociales debido al uso inadecuado de las redes sociales.
- Privación de las necesidades fisiológicas básicas tales como el sueño o el hambre en beneficio del uso de las redes sociales.
Del mismo modo, la ausencia de estos indicadores y sus elementos contrarios, indicarían un uso responsable y saludable de estas plataformas digitales, lo que estaría teniendo un impacto neutro o positivo en nuestra salud mental.
Riesgos del uso inadecuado de las redes sociales
Son numerosos los riesgos a los que nos exponemos si omitimos las señales de alarma y hacemos un uso inadecuado de las redes sociales. Éstos pueden incluso llegar a tener un impacto muy negativo en la salud mental de la persona. A continuación destacamos los más relevantes:
Influencia negativa en la identidad
Las redes sociales son un gran escaparate de una porción muy concreta y selecta de las vidas de otras personas. Las personas enseñan sólo lo que quieren mostrar, y con ello, llegan irremediablemente las comparaciones. Comparamos estilos de vida, logros académicos y/o profesionales, estándares de belleza corporal, etc. El problema es que muchas veces la parte que se muestra en las redes sociales no es la realidad completa de las personas, y este sesgo crea unas expectativas idealizadas y difíciles de alcanzar. Estas comparaciones y la imposición de estándares excesivamente elevados, tienen una implicación directa en la salud mental, ya que interfieren en el autoconcepto y en la autoestima, elementos claves en el bienestar psicológico.
Adicción
Diferentes estudios señalan las redes sociales como fuente susceptible para generar adicción. La necesidad de “estar al día” y “no perderse nada”, conocido como FOMO por sus siglas en inglés de “Fear of missing out”, pueden generar un enganche peligroso que se traduzca en una conducta adictiva finalmente. Y es que, como es sabido, no solo las drogas pueden crear adicción. Algunas conductas altamente reforzantes, como el uso de las redes sociales, tienen la capacidad de generar dopamina en determinadas áreas cerebrales, produciendo así un gran placer que tendemos a perpetuar.
Necesidad de validación externa
Los usuarios de las redes sociales pueden llegar a medir su valía o su éxito a través de la cantidad de likes y comentarios obtenidos en los contenidos que ellos mismos han compartido. Además, esta necesidad de saber si el contenido “ha tenido éxito o no”, puede favorecer la conducta adictiva anteriormente mencionada. Esta necesidad de aprobación externa altera el autoconcepto y la autoestima, y repercute directamente en la salud mental.
Reemplazo de las interacciones sociales físicas
Las interacciones establecidas a través de las redes sociales pueden mermar la cantidad y calidad de las interacciones sociales físicas. Además, los usuarios que crean una identidad alternativa para su vida virtual, encontrarán dificultades a la hora de relacionarse de nuevo con su entorno físico. Por otro lado, alteraciones como la ansiedad social se ven exacerbadas por este tipo de plataformas.
Ciberacoso
Las redes sociales brindan anonimato y una barrera geográfica a los usuarios. Algunos de ellos se escudan en esto para ejercer interacciones violentas a través de las distintas plataformas. Estas interacciones violentas tienen un gran impacto negativo en la autoestima y en el bienestar general de las personas que las reciben, además de mermar la empatía del que las comete.
Huella digital
Es importante tener en cuenta que todo aquello que se comparte en la red, permanece en la red. Por tanto, compartir contenido de determinadas características puede interferir en el bienestar de las personas a corto, medio y/o largo plazo. Además, la privacidad (y la seguridad asociada a ella) del contenido compartido puede verse alterada irremediablemente.
Beneficios de un uso adecuado de las redes sociales
A pesar de lo dicho, las redes sociales pueden ser una herramienta muy beneficiosa si se hace un uso responsable y saludable de las mismas. Dicho uso puede incluso tener un impacto positivo en la salud mental de las personas. A continuación, mencionamos los beneficios más relevantes:
- Interacción social. Gracias a las redes sociales, se pueden establecer y mantener relaciones sociales sin tener en cuenta barreras geográficas. Estas interacciones sociales pueden favorecer el sentido de pertenencia y reducir la sensación de soledad..
- Suponen un espacio de libre expresión de la identidad. Mediante la autoexpresión en distintos formatos (fotos, videos, textos, etc.), los usuarios pueden explotar su lado más creativo y compartirlo con otras personas con las que se relacionan a través de la red. De esta forma se trabaja el autoconcepto, clave en la construcción de la propia identidad, lo cual repercute en el bienestar general de las personas.
- Acceso a la información y otros recursos. Gracias a las distintas plataformas digitales, los usuarios tienen acceso a información y otros recursos sobre diferentes temáticas de interés. En concreto, destacamos el acceso a información rigurosa relacionada con la salud mental, clave para la prevención de enfermedades y la promoción de la salud. Además, en la red los usuarios pueden tener acceso a diversos grupos de apoyo para distintas afecciones, lo cual tiene un impacto positivo en el bienestar psicológico de las personas.
Recomendaciones para un uso responsable y saludable de las redes sociales
Una vez expuestos los riesgos y beneficios de las redes sociales, te recomendamos unas pautas para que les puedas sacar el máximo provecho y que estas tengan un impacto positivo en tu salud mental.
- Respeta los mínimos de edad establecidos por cada plataforma para poder acceder a ellas (aproximadamente 14 años).
- Si tienes a tu cargo a un menor de edad, habla con él y explícale los riesgos y beneficios que puede obtener de las redes sociales. Supervisa su uso (tiempo de acceso, privacidad de la cuenta, etc.) y ofrece un modelo saludable del uso de Internet y redes sociales.
- Trata de hacer un uso consciente de internet. Esto implica que vivas con atención al presente y te focalices en lo que estás haciendo en cada momento. Si estás trabajando, estudiando o interactuando con amigos, cíñete a esto sin que internet te interfiera. Te ayudará a ello establecer un tiempo determinado para el uso de las redes sociales dentro de tu espacio de ocio y tiempo libre y distribúyelo de manera equitativa con otras actividades agradables.
- Ten en cuenta las opciones de privacidad de las cuentas de tus redes sociales. Además, ten presente que la huella digital hará que lo que subas a internet se quede en internet.
- No todo lo que ves es verdad. Recuerda que lo que ves en redes sociales no es un reflejo exacto de la realidad.
- Realiza un “detox digital” cuando lo necesites. Desconéctate de las redes durante un periodo determinado de tiempo o elimina aquellas cuentas cuyo contenido esté interfiriendo negativamente en tu salud mental.
- Mantén los móviles bien lejos cuando se trate de ir a dormir, comer e interactuar con personas en directo.
Recapitulando…
Las redes sociales han llegado para quedarse. La mayoría de la población hace uso de ellas, pero lamentablemente no todas las personas las utilizan de manera adecuada, lo cual tiene un impacto negativo en la salud mental.
Conocer las señales de alarma o indicadores de un mal uso de las redes sociales es fundamental para prevenir el impacto negativo del mal uso de las redes en la salud mental. Por otro lado, tener en cuenta los perjuicios y los beneficios asociados a su uso, puede ayudarte a discernir qué es lo mejor para ti. Por último, tener en cuenta las recomendaciones para hacer un uso responsable de las redes sociales te ayudará a sacarles el máximo provecho y a disfrutarlas con responsabilidad y de manera saludable.
Recuerda tener estos factores en cuenta y haz un uso responsable de las redes sociales.
En Therapyside contamos con profesionales que te podrán ayudar a utilizar las redes sociales de forma que no interfieran con tu bienestar.