¿Qué es el apego desorganizado? Consideraciones generales
Imagina querer mostrar tu cariño a alguien, pero, al mismo tiempo, sentir miedo a que tus sentimientos no sean validados. Este conflicto es una de las principales características del apego desorganizado, un patrón de relación en el que la persona siente tanto la necesidad de conectar con otra persona, pero tiene un freno enorme a mostrar su cariño y establecer un vínculo de confianza.
Estos patrones afectan cómo nos relacionamos con las personas importantes en nuestras vidas, desde nuestras parejas hasta nuestros amigos, familiares y compañeros en el trabajo. Entre los distintos tipos de apego, este puede ser el más complicado de entender y el más difícil de experimentar.
¿Qué es el apego desorganizado?
El apego desorganizado es un estilo de apego en el que la persona experimenta una combinación de deseo de cercanía y miedo a la misma hacia las personas. Se aprende en la infancia, generalmente cuando la figura de apego (padres o cuidadores) alterna aleatoriamente comportamientos de cuidado y de ignorancia, e incluso agresión, hacia el niño, convirtiéndose en una fuente contradictoria de atención y miedo.
Cuando un niño no tiene una referencia clara de seguridad en sus cuidadores, desarrolla un patrón de apego confuso e incoherente. De adulto, esto se traduce en relaciones caóticas, con dificultad para confiar y una sensación de inestabilidad emocional.
¿Cómo afecta el apego desorganizado a las personas?
El impacto del apego desorganizado varía según la persona y sus experiencias de vida. Sin embargo, en general, afecta las siguientes áreas:
1. Relaciones de pareja
Las personas con apego desorganizado pueden experimentar relaciones intensas, pero inestables. Pueden:
- Sentir una gran necesidad de afecto, pero alejarse cuando lo reciben.
- Tener miedo al compromiso o a la dependencia emocional.
- Desconfiar constantemente de su pareja, incluso sin motivos reales.
2. Amistades y relaciones sociales
- Dificultad para crear vínculos de confianza.
- Sentir que los amigos no los valoran lo suficiente o que los abandonarán en cualquier momento.
- Alternar entre una gran necesidad de compañía y periodos de aislamiento.
3. Trabajo y vida profesional
- Problemas para recibir críticas o comentarios sobre su desempeño.
- Miedo al fracaso o a no ser lo suficientemente bueno.
- Sentir desconfianza hacia compañeros o jefes, lo que puede generar problemas en el trabajo en equipo.
“John Bowlby, el psicólogo que estudió el apego y desarrolló la Teoría del apego decía: "Muchas de las ansiedades y sufrimientos de la vida tienen su origen en las primeras experiencias de apego. Cuando estos vínculos son inseguros, las personas pueden pasar la vida entera buscando la seguridad que les faltó en la infancia".
Todos aprendemos de niños a confiar en los demás y a sentirnos seguros con ellos, en mayor o menor medida. Y es en los casos en los que aprendemos que los otros son impredecibles y no tenemos la confianza en sentirnos protegidos cuando necesitamos reescribir nuestros patrones de confianza con los demás. Siempre estamos a tiempo de aprender a desarrollar un apego sano y mejorar nuestra calidad de vida psicológica.” Comenta Isabel Aranda, psicóloga y colaboradora en Therapyside.
Síntomas de apego desorganizado
El apego desorganizado puede manifestarse de distintas maneras en la vida de una persona. Aquí te explicamos algunos de los síntomas más comunes:
Síntomas emocionales
- Miedo enorme al rechazo y al abandono.
- Ansiedad en las relaciones interpersonales.
- Cambios emocionales extremos, pasando de la cercanía al rechazo rápidamente.
Síntomas conductuales
- Dificultad para establecer relaciones sanas y estables.
- Comportamientos contradictorios con las personas cercanas.
- Tendencia a autosabotear las relaciones afectivas.
Síntomas psicológicos
- Baja autoestima y dificultad para confiar en sí mismo.
- Sentimientos de culpa o vergüenza en las relaciones.
- Sensación de no ser lo suficientemente bueno para los demás.
Características del apego desorganizado
Las personas con este tipo de apego suelen mostrar comportamientos contradictorios en sus relaciones, como:
- Ser cariñoso y frío al tiempo: quieren estar cerca de los demás, pero el miedo al rechazo o al abandono los hace alejarse.
- Reacciones emocionales intensas: pueden reaccionar de manera desproporcionada ante situaciones de estrés.
- Dificultad para regular emociones: alternan entre la necesidad de afecto y el rechazo a la intimidad.
- Desconfianza en las relaciones: les cuesta creer que pueden confiar en los demás o que realmente los quieran.
Apego desorganizado en parejas
- Cambios bruscos de actitud: un día pueden ser muy cariñoso y, al siguiente, distante o crítico.
- Dificultad para construir confianza: les cuesta creer que su pareja los quiera incondicionalmente, lo que alimenta sus inseguridades.
- Miedo al abandono: este temor puede provocar comportamientos impulsivos, como discusiones continuas o mucho tiempo en silencio.
- Dificultades en la comunicación: a veces, tienen problemas para expresar sus emociones y necesidades de forma clara y calmada.
Apego desorganizado en niños
- Pueden ser inseguros y desconfiados en sus relaciones con adultos.
- A veces buscan cercanía con sus cuidadores, pero luego se alejan con miedo.
- Suelen mostrar dificultades para gestionar emociones como la tristeza o la ira.
Apego desorganizado en adultos
- Tienden a experimentar conflictos en sus relaciones.
- Tienen una gran necesidad de cariño, pero miedo a confiar plenamente en los demás.
- Pueden desarrollar ansiedad o depresión debido a su inseguridad emocional.
Ejemplos de apego desorganizado
Para entender mejor cómo se manifiesta el apego desorganizado en la vida real, veamos ejemplos más concretos:
En una relación de pareja:
- Una persona con apego desorganizado podría llamar a su pareja por teléfono varias veces seguidas, preocupada por saber qué está haciendo. Sin embargo, al llegar a casa, esa misma persona podría mostrarse distante o evitar hablar del tema porque le da miedo parecer “demasiado dependiente.”
- Otro ejemplo sería alguien que, tras recibir un gesto cariñoso inesperado (como un regalo), responde con una actitud de rechazo o frialdad, porque internamente no sabe cómo gestionar la sensación de vulnerabilidad.
En la infancia:
- Un niño con apego desorganizado podría correr hacia su madre cuando llega a recogerlo del colegio, pero al llegar a ella, no quiere abrazarla y se mantiene rígido. Esto ocurre porque siente la necesidad de cercanía, pero, al mismo tiempo, teme que esa proximidad pueda ser insegura.
- Durante una discusión familiar, el niño podría esconderse detrás de una silla porque quiere estar cerca para escuchar lo que ocurre, pero no se atreve a acercarse demasiado por miedo a ser reprendido.
En el trabajo:
- Una empleada puede compartir abiertamente una idea en una reunión y buscar la aprobación del equipo. No obstante, al recibir feedback positivo, siente que no es merecido y decide dejar de proponer ideas, preocupada de que, en el futuro, no pueda estar a la altura de las expectativas.
- Un trabajador podría establecer una relación más cercana con su jefe, pero luego empezar a desconfiar de cualquier elogio que reciba, llegando a evitar conversaciones directas por miedo a un supuesto reproche o crítica que nunca llega.
- Un trabajador busca continuamente la validación de su trabajo por parte del jefe sin ser capaz de reconocer su aportación y valía.
¿Cómo un psicólogo te puede ayudar?
Trabajar el apego desorganizado no significa que tengas que cambiar quién eres, sino aprender a controlar tu mente y relaciones de una manera más sana con un psicólogo especializado.
Beneficios de la terapia online
- Identificar patrones de comportamiento que provienen de experiencias pasadas y cambiarlos.
- Aprender técnicas para regular emociones, como mindfulness o ejercicios de respiración.
- Aprender a pensar de una forma más sana.
- Mejorar la comunicación en las relaciones para reducir la inseguridad y la desconfianza.
- Fortalecer la autoestima, aprendiendo a valorarte sin depender de la aprobación de los demás.
Terapias recomendadas
- Terapia Cognitivo-Conductual (TCC): ayuda a cambiar pensamientos negativos sobre uno mismo y las relaciones.
- Terapia de apego: explora la historia personal para identificar cómo ha influido en las relaciones actuales.
- Terapia EMDR: útil si el apego desorganizado está relacionado con experiencias traumáticas.
El apego desorganizado puede hacer que las relaciones sean más complicadas y dolorosas, pero no es una sentencia de por vida. Comprender cómo te afecta y cómo lo has aprendido, es el primer paso para aprender nuevos patrones y desarrollar relaciones más seguras y satisfactorias.
Si te has sentido identificado con este artículo, recuerda que pedir ayuda no significa que haya algo "mal" en ti. Al contrario, es una señal de que estás preparado para mejorar tu bienestar emocional. Con el apoyo adecuado y trabajo personal, es posible construir relaciones más sanas, fortalecer tu autoestima y sentirte más seguro en la vida en general. ¡Siempre hay una oportunidad para sanar y crecer!
Puedes contar con un psicólogo online en Therapyside para seguir profundizando en tus emociones, priorizarte y cuidar tu bienestar psicológico. Si este artículo te ha ayudado a comprender mejor este tema, ¡esperamos que te sientas más empoderado para vivir una vida sin limitaciones!