10 claves para que el teletrabajo no te agote psicológicamente
Trabajar desde casa no es simplemente encender el ordenador y empezar a trabajar. Es una forma distinta de entender el trabajo que, aunque no es nueva, ha sido practicada por diversas profesiones como periodistas, profesores y artesanos que realizan parte de su labor en casa.
No es lo mismo que el "smart-working", que implica trabajar desde cualquier lugar y en cualquier momento, algo que solo ciertos profesionales pueden realmente aplicar.
El teletrabajo requiere madurez organizacional, liderazgo efectivo y una adaptación por parte de los colaboradores. Implica un cambio de paradigma respecto al presentismo, el rendimiento, la autonomía, la responsabilidad, el mérito y la dirección de personal.
Rediseño de procesos y métricas
El teletrabajo implica rediseñar los procesos laborales, establecer métricas basadas en el rendimiento en lugar de la presencia física, y desarrollar protocolos adaptados a las necesidades tecnológicas y de liderazgo para coordinar equipos en remoto.
Para el trabajador, también significa establecer pautas de organización y autocuidado específicas. El aislamiento y la falta de referencias espaciales, temporales y relacionales pueden provocar efectos como agotamiento, apatía, desorientación y desconexión de la organización, resultando en lo que se conoce como "estrés por teletrabajo".
Aquí tienes 10 recomendaciones para organizar tu teletrabajo, evitar efectos psicológicos negativos y cuidar tu salud mental:
1. Prepárate en “modo trabajo”
Asociamos trabajar con ciertos rituales y condiciones específicas. Al trabajar desde casa, es fácil descuidar estos rituales. Mantén hábitos de cuidado personal y adopta un aspecto profesional ante el ordenador para estar en “modo trabajo”. Establece rutinas diarias y semanales diferenciando entre días de trabajo y de descanso para evitar desorientación temporal y desánimo.
2. Créate tu espacio de trabajo
Tu hogar está asociado con el descanso y la vida familiar, no con el trabajo. Crea un espacio específico para trabajar, cuidando la ergonomía y el entorno. Añade objetos simbólicos, imágenes, y música que te ayuden a concentrarte y relajarte. Esto ayudará a tu mente a asociar ese espacio con el trabajo y te permitirá programarte inconscientemente para estar concentrado.
3. Organiza tus áreas de vida
El teletrabajo no es solo estar frente al ordenador por horas; se trata de rendimiento, no de tiempo dedicado. Valora el equilibrio entre tus áreas vitales y distribuye tu tiempo entre descanso, dedicación, disponibilidad y desenganche. Adapta este equilibrio a tus circunstancias personales para mantener la congruencia y la satisfacción.
4. Establece tus prioridades para el día
Organiza tus tareas según prioridades. Anota diariamente lo que necesitas hacer para alcanzar tus objetivos. Fija metas a largo plazo y objetivos semanales consensuados con tu equipo. Esta planificación te evitará la improvisación, te ayudará a tomar decisiones eficientes y a eliminar la procrastinación.
5. Cierra tiempos
No rendimos de forma uniforme durante todo el tiempo. Nuestra atención y concentración varían a lo largo del día. Identifica los momentos en los que eres más productivo y organiza tus tareas en función de estos picos de rendimiento. Establece límites temporales y marcadores externos para regular tu percepción del tiempo y evitar la sensación de pérdida de control.
6. Negocia con los tuyos
Negocia con tu familia los tiempos y el silencio necesarios para tu concentración. Ofrece tiempos específicos para estar disponible para ellos. Las soluciones efectivas deben ser válidas para todos los miembros del hogar, fortaleciendo los lazos y el sentido de pertenencia.
7. Gestiona tu autoexigencia
El crítico interno puede ser una barrera para la eficiencia en el teletrabajo. Revisa tu discurso interno y adopta una actitud positiva y flexible. Enfócate en tu actividad en lugar de en tus capacidades personales para mejorar tu rendimiento y reducir el estrés.
8. Auto-cuidado psicológico
Establece rutinas de autocuidado físico y psicológico. Realiza pausas para descansar la vista y estimular la concentración. Ejercicios de relajación, respiración consciente y estiramientos te ayudarán a renovar la energía. Practica la autoconsciencia y enfócate en pensamientos positivos para mantener un estado anímico adecuado.
9. Mantente comunicado
El teletrabajo no significa aislamiento. Mantén comunicación periódica con supervisores y equipos para sentirte conectado y alineado con los objetivos de la organización. Aprovecha las videoconferencias para coordinar tareas y compartir estrategias con tus compañeros.
10. Consigue retroinformación de tu actividad
Establece indicadores de avance para valorar tu trabajo y reforzar tu motivación. Usa listas de actividades realizadas y otros indicadores de rendimiento para obtener una perspectiva clara de tu progreso y mantenerte enfocado en tus objetivos.
Teletrabajar requiere hábitos específicos y un enfoque en resultados. Aunque presenta muchos beneficios, también conlleva riesgos que deben minimizarse para lograr la eficiencia y satisfacción del teletrabajador.
Conclusión
Teletrabajar puede traer numerosos beneficios, como la flexibilidad horaria y la posibilidad de trabajar desde un entorno familiar y cómodo. Sin embargo, también plantea algunos retos que requieren una buena gestión de tus emociones.
Establecer rutinas sólidas, crear un espacio de trabajo dedicado y equilibrar adecuadamente las responsabilidades laborales y personales es fundamental para mantener la productividad y el bienestar emocional. La clave está en adaptar las prácticas de trabajo a tus necesidades personales y profesionales, asegurando que puedas rendir al máximo sin comprometer tu salud mental.
Al aplicar estos consejos y estrategias, puedes transformar el teletrabajo en una experiencia positiva y productiva. La comunicación efectiva con tu equipo y la autogestión son esenciales para mantener el ritmo y la motivación. Recuerda que el éxito del teletrabajo no se mide solo por la cantidad de horas frente al ordenador, sino por la calidad de tu trabajo y tu capacidad para mantener un equilibrio saludable entre tus obligaciones laborales y tu vida personal.
Si quieres seguir potenciando tu bienestar emocional en el ámbito laboral, desde Therapyside te podemos ayudar a conseguirlo.