Qué hacer ante un ataque de ansiedad
Alrededor de un 30% de la población sufre ansiedad sin saberlo. En algún momento, estas personas pueden sufrir un ataque de ansiedad de forma inesperada sin estar preparadas para ello. La falta de información sobre qué hacer ante un ataque de ansiedad, puede provocar que la situación sea especialmente desagradable. Por eso queremos informarte y que estés preparada.
En este artículo vamos a explicarte qué es la ansiedad y por qué se producen los ataques. También te daremos una sencillas y prácticas pautas a seguir ante los temidos ataques de ansiedad.
Brevemente, ¿qué es la ansiedad?
La ansiedad es la respuesta que tiene nuestro cuerpo ante una situación que considera un peligro. Ante lo que reconocemos como una amenaza reaccionamos de forma defensiva mediante dos mecanismos: la defensa o la huida.
Y no pienses que esto es una cosa que ha surgido en los últimos tiempos a causa de nuestra vida ajetreada y de nuestro estrés diario. La ansiedad es un mecanismo ancestral que siempre ha formado parte de nosotros y de nuestros antepasados.
Cuando nuestros antepasados se veían amenazados, por ejemplo, por un depredador, surgía la ansiedad para prepararlos para una lucha o una huida eficiente. Un mecanismo de supervivencia. También es un mecanismo de adaptación. Es una respuesta que nos hace más eficientes ante situaciones amenazantes y consigue activarnos con el fin de que podamos superarlas con éxito.
La ansiedad envía señales a nuestro cuerpo para que se active: el corazón late más rápido, respiramos más deprisa, llega más sangre a nuestros órganos y a nuestros músculos, podemos correr más velozmente y luchar de forma efectiva. Nos mantiene alerta para la lucha.
Pero, ¿qué pasa cuando los mecanismos de ansiedad se disparan ante situaciones de la vida diaria que no suponen una amenaza realmente tan peligrosa? Nuestra vida no está en peligro, pero nuestra mente piensa que sí y se activa la ansiedad y los mecanismos de defensa que ello conlleva.
Entonces todo empieza a complicarse y se produce una situación en la que sentimos que no podemos controlar nuestro cuerpo. Y nos sentimos mal sin entender por qué ni cómo evitarlo. Y qué hacer ante un ataque de ansiedad se vuelve algo desconocido e imposible.
¿Qué pasa cuando tienes un ataque de ansiedad?
Llegados a este punto en el que ya sabes lo que es la ansiedad, te vamos a contar qué sucede cuando se produce un ataque de ansiedad. Muchas personas no saben reaccionar o se piensan que tienen otros problemas de salud graves cuando tienen una crisis de pánico.
Por ejemplo, vamos a compartir contigo la historia de Clara.
Clara es una mujer de 28 años. Trabaja como profesora en un colegio privado y en su tiempo libre estudia periodismo como segunda carrera. Vive con Pablo con quien mantiene una relación de pareja estable desde hace cinco años. Pero últimamente todo se ha puesto tenso porque Pablo le planteó que tendrían que empezar a pensar en formar una familia juntos.
Un día estaba cenando con unos amigos y, de repente, empezó a sentir que no podía respirar. Sentía un dolor punzante en el corazón que le oprimía el pecho. Empezó a sudar y se quedó rígida y tensa. No sabía cómo reaccionar. ¿Qué le estaba pasando? Al verla muy pálida y con la mirada perdida, una amiga le preguntó qué le estaba pasando, a lo que ella no podía contestar. Le temblaban las manos. Simplemente no sabía qué le estaba pasando. Solo sabía que se encontraba muy mal y no sabía por qué. ¿Sería un ataque al corazón? ¿Se moriría? Realmente parecía que iba a morir. Y empezó a asustarse, lo que no mejoró la situación. Finalmente, su amiga la llevó a urgencias donde le explicaron que su salud estaba perfectamente y que lo que le había ocurrido era que acababa de sufrir un ataque de ansiedad.
Clara tuvo un ataque de ansiedad, seguramente a causa de una situación de estrés por el ritmo de vida y el posible cambio que deriva del planteamiento de tener hijos. Pueden surgir miedos y dudas que se acaban materializando en ansiedad y que pueden acabar en un ataque de ansiedad si no los identificamos y trabajamos en ellos.
¿Qué hacer ante un ataque de ansiedad?
Ante un ataque de ansiedad existen dos alternativas: huir o enfrentarse. Como sospecharás, huir no es una de las mejores opciones para luchar contra el enemigo de la ansiedad. Si cada vez que tenemos un ataque de ansiedad salimos corriendo, nunca la superaremos y, muy probablemente, nuestro monstruo se haga cada vez más grande hasta que llegue un momento en que los ataques de ansiedad sean habituales en nuestra vida diaria.
Para saber qué hacer ante un ataque de ansiedad es importante que sepas:
- Cuánto dura: un ataque de ansiedad, aunque se nos haga eterno, no dura mucho: entre quince y treinta minutos. Tu ataque de ansiedad no durará más de media hora, así que intenta repetirte que el malestar es pasajero si te ocurre.
- No intentes controlarlo: es probable que cuando empieces a sentir los síntomas del ataque de pánico quieras controlarlo. Una vez se dispara la ansiedad, en tu cerebro se dispararán también la adrenalina y el cortisol. Sí, la hipófisis ya habrá dado la orden automática de que existe un peligro y de que deben ponerse en marcha los mecanismos de defensa pertinentes para sobrevivir. Mejor no intentes mandar mensajes a tu cuerpo como: "deja de respirar tan rápido" o "deja de sudar". En esta situación el cuerpo va por libre y la estrategia debe ser diferente.
- Tranquilo, no hay peligro real: tranquiliza tu mente con la idea de que no hay peligro alguno. No corres peligro, y repetírtelo te hará sentir a salvo.
¿Que hacer ante un ataque de ansiedad entonces?
Una de las cosas que querrás hacer cuando tengas un ataque de ansiedad es salir corriendo. No lo hagas. Huir nunca es la respuesta a esta situación.
Solo retírate, si te es posible, a un lugar tranquilo y en calma. Siéntate. Puedes adoptar una posición en la que estés cómoda. Siéntate y practica técnicas de respiración o relajación.
Otra de las cosas que puede ayudarte es relajar el estómago. Cuando tenemos un ataque de ansiedad nuestro cuerpo se tensa. Comprimimos el estómago de forma automática, lo que no nos permite respirar de forma completa y hace que no nos llegue suficiente aire. Eso lleva a sentir también sensación de mareo.
Si piensas en relajar el estómago poco a poco, empezarás a sentirte mejor. Es útil que utilices técnicas de distracción de la mente, ya sea cálculo mental o repetición de frases que te ayuden a tranquilizarte. Además, si no es la primera vez que lo sufres, en el momento que reaparezca la ansiedad puedes pensar que ya te has enfrentado a esa situación con anterioridad y no ha ocurrido nada grave.
Probablemente, si tienes personas a tu alrededor que se dan cuenta de lo que te está pasando, se preocupen y te empiecen a preguntar si te encuentras bien. Esa situación puede hacer que tu ansiedad empeore, así que intenta retirarte y estar tranquila.
Ya ves que lo que te puede ayudar de forma efectiva es reconocer los síntomas de los ataques de pánico, no asustarte ni pensar que te pasa nada grave: solo es ansiedad, el malestar pasará en poco tiempo y estás preparada para sobrellevarlo.
Para prevenir los ataques de ansiedad
Puedes trabajar tu mente y tu cuerpo con la finalidad de prevenir de forma efectiva el trastorno de pánico.
Si disminuyes tus niveles de ansiedad, los ataques de ansiedad también disminuirán. Puedes practicar meditación o yoga para trabajar tu cuerpo y mantenerlo en calma y en equilibrio. Las dos disciplinas te ayudarán a mantener un estado de relajación y a intentar solucionar los temas presentes que te producen la ansiedad. También aprenderás a respirar de forma completa, con el diafragma, lo que es muy útil para controlar la ansiedad.
La ayuda psicológica, sin duda, es el mejor recurso para tratar la ansiedad de forma eficaz. El apoyo de un psicólogo experto te guiará en tu proceso de mejora y te explicará estrategias técnicas para el control de la ansiedad.
Qué hacer ante un ataque de ansiedad puede parecer muy difícil, pero, como habrás descubierto a lo largo de este artículo, es posible y tú puedes hacerlo.
En Therapyside encontrarás profesionales que te pueden aconsejar, apoyar y ayudar a alcanzar tu mejor versión.