Ventajas de la terapia online
Existen múltiples situaciones que todos podemos experimentar a lo largo de nuestra vida y por las que tendremos que atravesar momentos difíciles. Las rupturas sentimentales, los conflictos en el trabajo, las épocas de más estrés o la pérdida de un ser querido son los ejemplos más frecuentes. Sin embargo, la psicología abarca una gran cantidad de aspectos de la vida.
Atrás quedaron los días en los que se creía que la ayuda psicológica solo era necesaria en casos extremos. A día de hoy, sabemos qué es un psicólogo y que pedir su ayuda es una decisión inteligente, y que no es necesario estar atravesando una depresión para necesitar apoyo psicológico online.
Un psicólogo nos puede ayudar a determinar nuestras metas cuando nos sentimos faltos de motivación, o a impulsar proyectos que tenemos en mente pero no sabemos abarcar. En ocasiones, solo hace falta que un experto nos proporcione las claves para encontrar en nuestro interior la forma de emprender con éxito aquello que deseamos pero no hacemos.
¿Cuáles son las principales ventajas de la terapia online?
En la actualidad, las nuevas tecnologías nos permiten llevar a cabo acciones que hace años resultaban impensables, como recibir terapia psicológica desde la comodidad de tu casa. Es algo increíblemente práctico que favorece un proceso sencillo, más económico que el tradicional y accesible, ya que se eliminan los problemas de desplazamiento.
Pero, ¿en qué puede ayudarte la psicología online? Este tipo de terapia es beneficiosa por todos los motivos ya mencionados, pero también porque en ocasiones es más fácil abrirse y relajarse en la distancia y a través de una pantalla, que de manera presencial. Este tipo de comunicación favorece la intimidad.
Aunque no lo creas, en muchas ocasiones es más sencillo hablar con total libertad con un desconocido, sobre todo cuando se trata de un profesional cuyo cometido es atenderte y ayudarte a solucionar lo que te está haciendo sentir mal. Actualmente, existe también el proceso de coaching llevado a cabo a través de Internet.
Por otra parte, uno de los aspectos más interesantes de la terapia online, es que tú puedes hablar con el psicólogo como si se tratase de un amigo, pero lo que cambiará será la respuesta y la ayuda que recibas, dado que se trata de un experto.
Al mismo tiempo, asegura una total privacidad y anonimato, algo que puede ser gran utilidad para aquellos que por cualquier motivo se sientan incómodos con la idea de acudir a una consulta. Aquí puedes encontrar más información sobre los pros y contras de la consulta psicológica online.
Atrévete al cambio
Gracias a una terapia online, podemos liberarnos de gran parte de la carga emocional que llevamos encima y que a veces nos sobrepasa, sin saturar a ningún amigo. Esto nos ayudará a disfrutar de un mayor bienestar, de un eficaz control emocional y de la seguridad extra que nos aporta saber que estamos poniendo en manos de un profesional lo que nos preocupa.
De esta forma, sabremos que estamos poniendo de nuestra parte para encontrar soluciones de manera responsable a todo aquello que nos está complicando la vida. Al mismo tiempo, estaremos liberando a más de un amigo de la responsabilidad que supone aconsejar sobre un asunto importante a alguien que te importa, sobre todo, porque hemos visto que la objetividad es fundamental.
Un psicólogo conoce las pautas que hay que seguir cuando se quiere modificar cierto comportamiento o mejorar la salud emocional. Esto lleva, con total seguridad, algo más de tiempo que una conversación vía WhatsApp en la que nos desahogamos con un amigo, pero los resultados serán duraderos y estarán adecuadamente planteadas las posibles soluciones.
¿Elegir entre terapias online o chatear con tus amigos?
Sí, muchas personas se plantean este escenario. Es probable que te hayas dado cuenta de cómo a menudo se utilizan las redes sociales, entre otras cosas, como vía de escape de la rutina diaria. Ya sea como distracción ante alguna tarea que resulta aburrida, como vía para compartir con amigos nuestros problemas y preocupaciones, las redes sociales ya forman parte del día a día.
Es innegable que herramientas como WhatsApp nos han facilitado la comunicación, especialmente en cuanto a la inmediatez, y a que podamos expresar en cada momento todo aquello que nos ocurre a nuestras amistades para que nos calmen y aconsejen. Ahora bien, esto jamás puede compararse con la ayuda profesional de un psicólogo para solucionar adecuadamente un problema. Los temas a tratar en terapia online son varios y cumplen un rol determinado, basado en la experiencia de un profesional que analiza tu situación con objetividad. Los consejos de tus amigos son un aporte muy valioso, pero no están avalados por la experiencia que puede tener un psicólogo.
En este sentido, la clave está en beneficiarse de las herramientas digitales que tenemos a nuestro alcance por la comodidad, la flexibilidad y la inmediatez que nos proporcionan, pero dirigiéndonos a un profesional cuando lo que buscamos es ayuda y orientación, ese es precisamente uno de los papeles del psicólogo en el día a día. Además, también se puede aprovechar esa cercanía tecnológica para afianzar lazos con los nuestros.
Si aún piensas ¿por qué voy a necesitar a un psicólogo si ya tengo a mis amigos? Presta atención a los motivos que te contamos a continuación, ya que te ayudarán a entender mejor las diferencias más importantes entre ambos.
¿Por qué no es lo mismo hablar con un amigo que con un psicólogo?
Expresar y compartir nuestras preocupaciones a nuestros seres queridos y amigos más cercanos no solo es saludable, sino que forma parte con frecuencia de las recomendaciones de un profesional en terapias online. Sin embargo, existe una serie de motivos que explican por qué el apoyo de nuestros familiares o amigos, ya sea de manera presencial o a través de mensajes escritos, no tiene la misma eficacia que la ayuda de un psicólogo por Internet.
1. Los amigos no son profesionales
En primer lugar, aunque tus amigos te quieran y te conozcan, la realidad es que no son profesionales y, aunque tengan muy buena intención, es probable que no puedan darte las recomendaciones que más te ayudarían. Imagínate a tus amigos dando consultas a desconocidos... ¿Raro, verdad?
Normalmente, cuando contamos un problema a un amigo, intentará darnos una solución rápida y superficial, de forma que podamos quitar peso a nuestro problema y sentirnos rápidamente mejor. Esto puede ayudar a salir del paso en un momento determinado, pero lo más probable es que no estemos solucionando nada.
Con la ayuda de las terapias online, en cambio, el profesional nos ayuda a encontrar la raíz de aquello que nos preocupa. De manera que, aunque pueda no ser el camino más rápido ni fácil, podamos superar con éxito, eficacia y seguridad dicha dificultad. Después de cada una de tus sesiones irás viendo todo cada vez más claro.
Además, podremos encontrar una perspectiva más amplia para observar nuestros conflictos, detectar todos aquellos que se producen de manera recurrente y aprender a gestionar nuestras emociones de forma adecuada.
Es decir, que el apoyo de las terapias online nos permite encontrar las herramientas de las que disponemos para hacer frente a lo que nos ocurre de manera eficaz, frente a los “parches” que suponen los ánimos que recibimos de nuestros amigos.
2 . Un amigo no es imparcial
Tus amigos no pueden ser imparciales. Es evidente que tus amigos atenderán a tu versión y no serán objetivos, pues siempre estarán de tu parte y tenderán a darte la razón en todo aquello que les cuentes. Un profesional, sin embargo, irá más allá y querrá encontrar el origen de tus problemas, al margen de los acontecimientos específicos y aislados que te suceden.
Para afrontar las dificultades, es necesario abordarlas en profundidad. Tanto la imparcialidad como la capacidad de ver con perspectiva lo que te ocurre, entran dentro de las competencias del psicólogo que atiende las terapias online.
3. La psicología no es su labor como amigo
Los amigos nos reconfortan, un psicólogo nos ayuda a encontrar en nosotros mismos las auténticas soluciones a nuestros problemas. Esta es la diferencia más importante que debemos entender. Una cosa es sentirnos arropados por nuestros seres queridos, y otra, solucionar nuestros propios problemas con responsabilidad y eficacia en consultas psicológicas online.
Piensa en alguna ocasión en la que un amigo/a te haya contado un problema o te haya expresado su angustia por algo que haya ocurrido. Probablemente habrás intentado calmarle, pero no has indagado en las causas de su problema o de su manera de reaccionar porque vuestros grupos de Whatsapp no son terapias psicológicas online, no eres psicólogo y no tienes por qué saber hacerlo, ¡es normal!
Por este motivo, es igualmente probable que en esos momentos te hayas sentido algo impotente por no saber cómo ayudar más y mejor a ese amigo o familiar que tanto te importa. No lo olvides, los amigos están para hacer sentir bien y apoyar, pero no son profesionales.
4. Él/ella también tiene sus propias preocupaciones
En ocasiones, es fácil sobrecargar a un amigo/a con los propios problemas, muchas veces sin ser conscientes de ello. Por supuesto que un buen amigo te escuchará y tratará siempre de ayudarte en todo lo que esté en su mano y de la mejor manera posible, pero es importante tener presente que él, o ella, tiene sus propias preocupaciones. En este sentido, evidentemente, un psicólogo online no va a verse en ningún caso sobrepasado ni le va a incomodar que le cuentes todo aquello que te preocupa.
Con los amigos hay que compartir también buenos momentos, no solo los dramas y los agobios. Cuando nos ocupamos de solucionar nuestros problemas de la manera más adecuada, nos sentimos mejor y podemos disfrutar de más momentos agradables en compañía de quienes queremos.
5. Los psicólogos no tratan a sus amigos
Es especialmente relevante el hecho de que los propios psicólogos no deben tratar a sus amigos y familiares. La amistad, la confianza y la cercanía pueden, de hecho, dificultar la tarea de un profesional, ya que la imparcialidad se vuelve prácticamente imposible y es muy complicado separar dichos ámbitos.
Que los psicólogos no traten a sus amigos o familiares es la mejor muestra de que tu amigo no puede hacer las veces de psicólogo contigo, y mucho menos hacerlo de manera eficaz.
Aprende a separar los momentos de desahogo con amigos y la ayuda de un profesional para encontrarte mejor, no tienes que renunciar a ninguna de ellas.
En Therapyside contamos con profesionales que te pueden aconsejar, apoyar y ayudar a alcanzar tu mejor versión.